Básicamente podríamos repetir lo mismo que dijimos en el análisis del Moto G4 para este Moto G4 Plus. Disponen del mismo diseño –este también está fabricado en plástico– al igual que mismas dimensiones y peso. No será mucha la sensación de premium, pero ya dijimos que el teléfono sienta bien en la mano y se agarra bien.
En su interior contamos con un
hardware similar a su hermano pequeño, aunque como veremos difieren en algunos puntos. Snapdragon 617 junto con la Adreno 405, 2 GB de RAM, 16 GB ampliables gracias a una tarjeta microSD y una autonomía de 3.000 mAh. También contamos con carga rápida, pero en esta ocasión
disponemos de un lector de huellas en la parte inferior del terminal, algo ya necesario e imprescindible en todos los terminales.
En cuanto al rendimiento, lo esperado. Este hardware funciona fenomenal y el hecho de disponer de Android 6.0 Marshmallow hace que utilizar el Moto G4 Plus sea una delicia. Ni un fallo de rendimiento ni un cuelgue, por lo que podremos hacer uso de cualquier aplicación o juego sin problema alguno.
En cuanto a la pantalla, nos encontramos con un panel de 5,5 pulgadas FHD que se ve bastante bien. El sonido también es bueno, y es que como hemos dicho anteriormente, las sensaciones de este terminal no difieren en exceso respecto de las del Moto G4.
Donde si existe grandes diferencias es en el apartado fotográfico, ya que el Moto G4 Plus monta una cámara trasera de 16 megapíxeles, notándose una clara diferencia con los 13 megapíxeles tanto del modelo “normal” como de su predecesor, el Motorola Moto G 2015. Este incremento en la calidad de las fotografías hace que el Moto G4 Plus sea una opción mucho más atractiva que la versión “normal”.
